El objetivo de este símbolo es certificar productos ecológicos de España (mayoritariamente alimentos, aunque también hay productos de limpieza, textiles, maderas, cosmética, higiene personal, bricolaje y productos de jardinería). Es un símbolo opcional que puede acompañar al logotipo ecológico europeo. El distintivo es similar en todas las autonomías para que el consumidor pueda identificarla con mayor facilidad.
En España, las competencias en cuanto al control del mercado han sido transferidas a las Comunidades Autónomas. Cada Comunidad Autónoma tiene su Consejo o Comité Regulador, que depende de su Consejería o Departamento de Agricultura. Es decir, las Comunidades Autónomas tienen las competencias de control directo y último sobre la producción y certificación ecológicas.
El Consejo Regulador de cada comunidad es el que somete a inspecciones a las empresas y toma las muestras de cada fase del producto. Finalmente es el que otorga un sello de producto ecológico, en caso de cumplirse todos los requisitos, que es la única garantía oficial de que el producto procede de una finca o industria sometida a los controles e inspecciones dictados por la Comunidad Europea.
Los Consejos Reguladores de Producción Ecológica de España son:
















Castilla-La Mancha: La autoridad Competente de la «Agricultura Ecológica» en Castilla-La Mancha es el Servicio de Evaluación.
Dirección General de Infraestructuras y Desarrollo Rural. En esta comunidad autónoma convive la certificación pública con empresas certificadoras privadas.
Referencias
Web del Ministerio de Agricultura de España sobre producción ecológica